También llamado vidrio espejado o reflectante, este material cuenta con una capa metálica o dieléctrica en una de sus caras, lo que le permite reflejar la luz y reducir la cantidad de radiación solar que atraviesa el vidrio.
CONTROL DE LUMINOSIDAD:
Reduce la transmisión de luz.
EFICIENCIA TÉRMICA:
Disminuye la cantidad de calor que ingresa a un ambiente.
MAYOR PRIVACIDAD:
Limita la visibilidad desde el exterior.
Es ideal para fachadas y ventanas donde se busca regulación térmica y control de la iluminación natural.